Mecanicismo productivo

Tu productividad se construye sobre hacer cosas significativas

Michael Linenberger

He escuchado muchas veces decir que el término productividad lleva a engaño porque todo el mundo piensa en la versión mecanicista del mismo. El mecanicismo es un término que relacionamos con las revoluciones industriales, con la producción en cadena, con Henry Ford y su modelo de empresa que revolucionó el mundo. Y coincido en la conclusión de que la productividad personal poco o nada tiene que ver con esa variante mecanicista del término, donde se nos pide producir más outputs con los mismos o menos inputs.

A pesar de lo anterior, creo que la productividad personal también ha podido caer en lo que critica, en el “mecanicismo productivo”.

¿A qué me refiero?

Me refiero a que la gente empieza por la capa de control de un sistema productivo, sea éste GTD o MYN, y a partir de los éxitos que consigue fácilmente en esa capa de control, intenta ir hacia arriba, hacia la perspectiva en GTD o hacia la capa de creatividad en MYN, y fracasa porque considera que las metas no son más que un conjunto de acciones más o menos complejas de organizar, es decir, pretende resolver su vida mediante el control únicamente.

Creo que viene a cuento recordar la cita atribuida a Einstein que dice:

Locura es hacer la misma cosa una y otra vez esperando obtener diferentes resultados

Cierto es que cuando descubrimos el control productivo todo es maravilloso porque hacer las cosas de otra manera nos hace obtener resultados distintos, resultados mejores. Pero de la poca gente que se interesa por la productividad personal es realmente un porcentaje nimio el de la gente que consigue ir más allá del control. A veces incluso la sensación de no avanzar hace que abandonen todo lo bueno conseguido hasta el momento.

Creatividad vs Control

Crear requiere de una energía diferente a la que usamos en el Control. Controlar es reactivo, intenta reconducir el caos mediante la disciplina y la fuerza de voluntad; crear es mucho más proactivo y está relacionado con ese sentido de “fluir”, de avance, de algo positivo.

Tendemos a confundir también metas con resultados. Los resultados pueden conseguirse únicamente mediante la capa de control, naturalmente siendo bueno en ello. Es lo que llamamos objetivos SMART que, entre otras cosas, son medibles. Pero las metas son algo más que resultados, se mueven en otra dimensión temporal, mucho más a largo plazo y su consecución necesita de una visión que promueva una motivación que nos haga llegar a ella.

En mi opinión, es donde los sistemas de productividad personal fracasan y, con ellos, las personas que tratamos de aplicarlos. Y ninguno, al menos de los que yo conozco, proporciona una solución más o menos implementable;  aunque he de decir que MYN lo intenta o al menos lo explica (en realidad GTD también lo intenta pero tela marinera con lo de los 6 niveles de altura).

MYN propone tres capas: la de control, la de la creatividad y la de la conexión. En las últimas entradas he  explicado bastantes componentes de la capa de control (hay más, pero aquí lo voy a dejar) que tiene muchas similitudes con la capa de control de GTD (a pesar de los que digan los tali-GTDs jajaja).

En las próximas semanas voy a explicar el tratamiento que propone MYN para las metas porque me parece interesante, aunque adelanto, ya, que magia no hay (aunque esto, con todo, me parece más implementable que sus propuestas de la capa de conexión).

Básicamente, y a modo de guion, MYN propone trabajar las metas centrándonos en 4 elementos o pasos:

  • La visión (Vision goal).
  • El resultado (Target goal).
  • La activación (algo original y, aunque “chirriante”, interesante).
  • La primera acción.

La tesis de Michael Linenberger es que:

No se puede pensar en lograr metas sólo a base de fuerza de voluntad, trabajo duro y ejecución perfecta. Eso es puro control, sin cabida a la creatividad

Personalmente estoy de acuerdo. Y tú, ¿qué opinas?